El sábado último, se dio a conocer la resolución del Ministerio de Justicia sobre la reapertura de Tacumbú a nuevos ingresos, a la parte del cierre de Emboscada Antigua.
Esta decisión trajo inevitablemente a colación, la coincidencia con la exigencia que había hecho el clan Rotela, de volver a permitir el ingreso de internos. La comparación ofuscó al ministro Barchini, quien aseguró que, el grupo criminal no tuvo injerencia en el caso.
“Se genera un problema de hacinamiento mayor en otras cárceles. ¿Eso significa caer en la petición del Clan Rotela? Al Clan Rotela no le di ninguna entidad. Rotela es un delincuente más como González o Giménez y a mí, no me va a marcar la ruta ni Rotela ni Abc ni mucho menos Última Hora”, afirmó el secretario de Estado, en un contacto con la emisora 730 AM.
Reconoció, sin embargo, que el hacinamiento sigue existiendo en Tacumbú, aunque disminuyó levemente con este periodo de cierre.
Sobre su negativa a ir a conversar con el clan Rotela, indicó que, él representa al Estado y, como tal, no puede ir a negociar con un delincuente, sea cual fuere su apellido.
En cuanto a la huelga de los agentes penitenciarios, sostuvo que, en este momento se está cortando cabeza a las mafias y que, los intereses son económicos.
Barchini afirmó que, en 60 días es imposible encontrar una solución inmediata, pero que, se está trabajando sobre los reclamos legítimos y las reivindicaciones históricas.