Desde enero de este año, varios trabajadores han reportado que no han recibido sus haberes, sumando ya cuatro meses de retraso para abril. Este ciclo de incertidumbre financiera ya había afectado a la comunidad el año anterior, con algunos empleados recordando los problemas de pago experimentados en el 2023.
A pesar de las recaudaciones aparentemente robustas que suelen caracterizar esta época del año para las municipalidades, Hernandarias se encuentra en una situación crítica, con los funcionarios acumulando meses de atrasos salariales. Con un sentimiento generalizado de temor a represalias y una creciente falta de confianza, varios empleados han compartido sus experiencias, describiendo una situación que se asemeja demasiado a la del año pasado. Es importante señalar que este año algunos trabajadores solo han recibido partes de sus sueldos correspondientes al 2023.
Lamentablemente, los retrasos en los salarios se han convertido en una triste rutina para los leales trabajadores del municipio. Durante la gestión de Nelson Cano, la administración se vio obligada a recurrir a varios préstamos millonarios para cubrir los haberes. Incluso el pasado diciembre, el ejecutivo intentó obtener más créditos bancarios para pagar aguinaldos, pero al no obtener la aprobación bancaria, se vio obligado a solicitar adelantos de impuestos a empresarios para cumplir con los pagos de fin de año.
Este año, Nelson Cano logró pagar los salarios correspondientes a los últimos meses del 2023, pero ahora se enfrenta nuevamente al desafío de cubrir cuatro meses de sueldos del año en curso. Los funcionarios, preocupados pero decididos, han pedido que se publique la situación, manteniendo la esperanza de una respuesta económica por parte de la administración municipal.
A pesar de las crecientes críticas sobre la gestión municipal, el intendente Cano parece mostrar poca preocupación por la mala administración de la entidad. Los rumores en la capital de la energía sugieren que el ejecutivo sigue adelante con sus planes, sin inmutarse por las denuncias sobre su bochornosa gestión. Aún así, Cano parece confiar en recuperar la confianza del pueblo.
La difícil situación financiera también afecta a los concejales, quienes enfrentan el tercer mes de retraso en sus dietas sin tener una idea clara de cuándo podrían recibir sus pagos. Al ser consultados, la mayoría de los ediles coincidieron en que no han recibido sus remuneraciones desde febrero.