Una tragedia sacude a la comunidad de Mariscal Estigarribia, Chaco, tras la muerte de Liz, una joven madre de cuatro hijos, en un incendio registrado en la madrugada del viernes. Los familiares acusan como principal sospechoso a su expareja, Andrés Gómez, quien habría estado en la vivienda horas antes del siniestro.
Liz, quien llevaba más de 10 años residiendo en la localidad, trabajaba en el bar de Gómez pese a haber terminado la relación meses atrás. Según su cuñada, María Trigo, Andrés era extremadamente celoso y había amenazado a la víctima en reiteradas ocasiones. “Le decía: Si yo no soy feliz, vos tampoco. Frente a los clientes la maltrataba», aseguró.
El incendio consumió por completo la vivienda y los restos de la víctima fueron encontrados calcinados. «Solo hallamos la cabeza; el resto del cuerpo fue destruido por las llamas», informó el fiscal Lucrecio Cabrera, quien señaló que el incendio pudo ser provocado para encubrir un crimen.
Andrés Gómez se presentó en la comisaría poco después del hecho, declarando que desconocidos habrían disparado e incendiado la casa. Sin embargo, los familiares cuestionan su versión y exigen justicia. A pesar de ser señalado como principal sospechoso, Gómez fue liberado tras realizarse pruebas dactilares y de parafina.
Los hijos de la víctima, quienes se encontraban en Luque bajo el cuidado de su abuela, quedaron huérfanos. La comunidad exige respuestas claras y el esclarecimiento del caso, mientras los restos de Liz llegaron el sábado a la morgue judicial de Asunción para continuar con las investigaciones.