La superficie erradicada equivale a nueve veces el parque Ñu Guazú, símbolo ambiental de Asunción.
Amambay, Paraguay – En una operación sin precedentes, fuerzas conjuntas de Paraguay y Brasil lograron anular 656 toneladas de marihuana en solo siete días, asestando un duro golpe a las redes criminales que operan en la frontera. La incautación, valorada en 19,6 millones de dólares en pérdidas para el narcotráfico, incluyó la erradicación de 215 hectáreas de cultivos ilegales, un área comparable a nueve parques metropolitanos Ñu Guazú (23 hectáreas cada uno).
La Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD) de Paraguay y la Policía Federal de Brasil, con apoyo del Ministerio Público, el CODI-FTC y el Grupo de Helicópteros de la Fuerza Aérea Paraguaya, desplegaron la operación «Nueva Alianza» en zonas boscosas del departamento de Amambay. Los operativos, centrados en localidades como San Luis, Santa Clara y Ñu Vera, permitieron desmantelar 35 campamentos narcos, incautar 2.400 kilos de droga procesada y 70 kilos de semillas de cannabis.
Según las autoridades, la marihuana erradicada hubiera sido suficiente para producir 656 toneladas de la sustancia, cifra que posiciona esta acción como la mayor incautación global en un lapso tan breve, superando récords operativos anteriores. «Esto no solo impacta la logística del crimen organizado, sino que también interrumpe su financiamiento», destacó un vocero de la SENAD.
Las tareas, que continuarán en los próximos días, combinan inteligencia aérea, patrullajes terrestres y tecnología para rastrear áreas remotas. La colaboración binacional resalta como un modelo frente a un flagelo transfronterizo que afecta a la región.
