Los neurocirujanos le colocaron un dispositivo en la cabeza para drenar la sangre acumulada, lo que indica la gravedad de las heridas sufridas y la posibilidad de secuelas incapacitante, informó el Dr. David Torales, director médico del Hospital Rigoberto Caballero.
“Su condición es estable dentro de la gravedad. Actualmente está sedado, intubado y en terapia intensiva, completamente desconectado del mundo”, mencionó el médico, en una entrevista con la emisora 650 AM.
El suboficial mostró una evolución lenta pero favorable, con cuidados intensivos y cercanos. El doctor Torales manifestó que el uniformado fue intervenido quirúrgicamente nuevamente anoche debido a la persistencia de la hemorragia. “Se le colocó un dispositivo especial para drenar la sangre acumulada dentro del cerebro”, explicó.
La decisión de someterlo a esta nueva cirugía fue tomada tras una tomografía que reveló la necesidad urgente de drenar la hemorragia. “Los neurocirujanos le colocaron un catéter para reducir el hematoma y la presión intracraneal”, agregó.
El Dr. Torales detalló que el dispositivo colocado no solo mide la presión intracraneal, sino que también drena el líquido acumulado. A medida que el edema cerebral disminuya y la evolución del paciente sea favorable, el dispositivo será retirado.
“Aunque la evolución es favorable, es improbable que se recupere completamente debido a la gravedad de las lesiones. Las tomografías indican que podría quedar con secuelas neurológicas permanentes”, concluyó el médico.
