La niña de solo 5 años contó lo ocurrido al despertar de terapia intensiva. Los padres, como castigo, a ella y a su hermanito los metían a un barrial con cloro, que hasta la cambió el color de piel.
De terror. Un niño de tan solo 4 años falleció por quemaduras tras haber sido metido en un tambor con cloro. ¿Los responsables? Serían sus propios padres, quienes ayer fueron imputados por homicidio doloso y tentativa de homicidio, con relación a la hermana del pequeño, quien sigue luchando por su vida.
Hace unas semanas, los incesantes gritos de ambos niños levantaron las alarmas de los vecinos de una vivienda ubicada en la ciudad de Luque. Pese a que estaban acostumbrados a escuchar eso constantemente, estos sabían que algo anormal ocurría.
Rápidamente, los auxiliaron y se dieron cuenta que fueron metidos al tambor de agua con altos niveles de cloro. Las quemaduras las tenían en todo el cuerpo y, se presume que los pequeños ya fueron metidos “como castigo”, en diversas ocasiones, porque fueron cambiando el color de la piel.
CAMBIO TOTAL. Inicialmente, la investigación era por violación del deber del cuidado, ante un aparente descuido nada más a sus hijos, quienes se encontraban internados.
Sin embargo, luego de que la niña de 5 años haya despertado, el panorama del caso cambió drásticamente.
“Mi mamá me pega y papá también con la zapatilla. Mamá me metió en el tanque y papá también y ahora estoy en el hospital. Me da miedo mi mamá, pero le quiero, a mi papá también. Ya no me quiero ir en la casa, ahora quiero dormir ¿Puedo dormir?”, dijo la pequeña a un sicólogo forense en su lugar de internación, contaron en NPY.
Esto contradijo por completo la versión de los padres, quienes ahora ya están con prisión. Ellos mencionaron en un primer momento que sus hijos “cayeron” en el tambor mientras la mamá limpiaba la casa.
Ya se había hecho una constitución en la casa, con agentes de Criminalística, y “realizando la inspección del domicilio, de la medida del tambor, lleva a la sospecha del ministerio Público que esa teoría (de que se cayeron) era imposible, porque esos niños no podían ingresar a ese tambor solos”, detalló la fiscala Sandra Ledesma.
La agente los imputó y solicitó la prisión preventiva, pese a que la mujer está nuevamente embarazada. “Está en peligro otro niño que también está en derecho de protección desde la concepción”, sostuvo la agente fiscal.
CASTIGO. Confirmó que los niños eran ingresados de manera forzosa, como castigo, y se los dejaban ahí. “Tenemos información y presumimos de que los niños fueron dejados dentro del tambor y que la mamá salió dejándolos dentro del tambor”, lamentó.
Además, confirmó que “hay indicios de que estas personas sabían que el someter a dos niños dentro de un tambor podría ocasionar la muerte”.
El señor (34) trabaja en una aguatería y realizaba la purificación del agua en su vivienda, por lo que tenía todos los elementos ahí, con los cuales habría acabado con la vida de su pequeño.