Según Britez, las binacionales estaban realizando contribuciones al IPS únicamente con relación al salario básico de sus empleados, a pesar de que la ley establece que deben aportar por la totalidad de los beneficios brindados a sus trabajadores, a excepción de la ayuda familiar y el aguinaldo. Esta situación llevó a una acumulación de deudas que se remonta a la época de la pandemia.
“Estamos en un diálogo franco con nuestros directores administrativos y los directores de las binacionales para resolver esta situación. El monto de la deuda vamos a dar a conocer una vez que estemos de acuerdo todos, porque nosotros tenemos un monto y ellos tienen otro monto”, explicó el presidente del IPS.
Britez destacó que la previsional no solo enfrenta desafíos financieros con las binacionales, sino también con otras entidades públicas que también mantienen deudas con la institución. En ese sentido, dijo que el presidente Santiago Peña expresó su compromiso de colaborar para garantizar que el IPS pueda acceder a los recursos económicos que tanto necesita.
Mencionó que ya mantuvieron reuniones con representantes de la Itaipú y se programan futuros encuentros con la Yacyretá. Además, se está realizando un proceso de consolidación de las deudas en conjunto con el Ministerio del Trabajo.
G. 4 BILLONES DE DEUDA DESDE 1980
Esta semana, el director de Aporte Obrero Patronal del Instituto de Previsión Social, Américo Riquelme, explicó que la tasa de morosidad en aportes patronales es del 40% y que la deuda asciende a G. 4 billones desde 1980.
Indicó que cuentan con una resolución que les permite cobrar a las empresas o patrones que adeuden a sus empleados y afirmó que “seguirán insistiendo y agotando instancias”.
“Lo que buscamos es recuperar el capital constitutivo de las personas, que las personas puedan conseguir ese beneficio tan anhelado en la vejez”, puntualizó.
