Al no poder controlarlo, y por temor a ser víctima de agresiones físicas, su madre pidió ayuda desesperada a la Policía Nacional y el despechado fue aprehendido. Ocurrió el martes a las 21:30h en el Km 24 Monday, a 2.000 metros de la ruta PY 02.
En plena víspera del Día del Trabajador y cuando todo parecía que solo sería festejo, Rubén Fretes Caballero (38) fue sorprendido por su pareja sentimental, quien le comunicó que ya no quería seguir y puso fin a la relación que tenían. Destrozado por la noticia inesperada y sin poder revertir la situación, el hombre ahogó sus penas en alcohol y se pegó tremenda borrachera.
Al llegar a su vivienda, el hombre fue directo a su habitación y comenzó a destrozar todo lo que encontraba en su frente, como electrónicos y muebles. También destrozó una ventana de vidrio y utilizó los pedazos para auto infligirse cortes en los brazos. Su madre María Justina Caballero de Fretes (60) trató de calmarlo, pero el mismo estaba completamente descontrolado por causa de la borrachera y los nervios.
Desesperada y con temor a que su hijo la agreda físicamente, la mujer pidió ayuda desesperada al Sistema 911. Agentes de la Comisaría 8va fueron hasta la vivienda e ingresaron al lugar, encontrando destrozos y manchas de sangre por todos lados. Fretes fue aprehendido con el uso de la fuerza y fue derivado a la comisaría, quedando a disposición de la fiscal Susan Vega, de la unidad especializada en violencia familiar.
