El principal sospechoso de la muerte de Jessica Paola Duarte Scappini, de 48 años, fue procesado, en principio, por violencia familiar. Todavía no se descarta la posibilidad de un presunto feminicidio. Se aguardará el resultado de la autopsia para ampliar o no la causa en contra del hombre.
La fiscala Fátima Villasboa imputó por violencia familiar a Miguel Darío Sánchez Romero, de 48 años, único detenido e investigado tras la muerte de Jessica Paola Duarte Scappini (48).
La autopsia confirmó lesiones traumáticas a nivel del rostro, la zona del cráneo, abdomen y piernas.
Para el Ministerio Público hay evidencias concretas para la imputación, informó Telefuturo.
En tanto, ampliar la causa por feminicidio está sujeto al informe final de la autopsia, cuyos resultados estarán en aproximadamente 30 días.
Se manejan dos hipótesis sobre el motivo de la muerte de la mujer; la primera es que aparentemente tenía un tumor en el abdomen y los golpes provocaron su estadillo; y la segunda conjetura es que hubo un fallo renal derivado de los golpes que sufrió.
No obstante, esos presupuestos deben ser confirmados por los profesionales de la Morgue Judicial.
El imputado también guardó silencio ante la fiscala Yrides Ávila.
El fallecimiento de Jessica Duarte Scapinni se reportó en la madrugada del pasado viernes tras el hallazgo de un cuerpo con signos de golpes, tendido en la cama de su dormitorio, en una vivienda ubicada en el barrio Valle Apu’a de la ciudad de Lambaré, del Departamento Central.
Días antes, la mujer sufrió una brutal golpiza por parte de su pareja, por lo que acudió hasta el Hospital de Trauma, alegando que se cayó de unas escaleras, de acuerdo con el relato de su hijo.
Sin embargo, pese al dolor y los golpes que presentaba, la mujer fue dada de alta del Hospital de Trauma y enviada a su domicilio, donde fue encontrada muerta en su cama.
ÚH
